sábado, 12 de julio de 2008

Tenemos que rezar todas las noches

Tenemos que rezar más. Seguro que hay muchos días en los que Dios nos echa de menos. Me imagino que Dios pensará: "pero bueno, y este chico, o esta señora: esta persona ¿porqué no me habla? Habla con todo el mundo: con su padre, con su amiga; con todo el mundo menos conmigo. Se pasa horas dialogando con la televisión, con el ordenador, incluso habla solo. ¿Porqué no me habla?". Tenemos que rezar más. Rezar es hablar con Dios. Por la noche antes de acostarnos, cuando se hace el silencio alrededor, o de día en pleno trabajo.

No hay comentarios: