domingo, 5 de junio de 2011

¡Voy volando!

La puntualidad cuesta. Supone el esfuerzo de empezar las cosas en su momento, dejarlas cuando tocan y dedicarlas el tiempo justo para no retrasar lo demás. Dicho así, de carrerilla, asusta un poco, estresa, como dirían las de 2º de la ESO, pero no es para tanto.

La del anuncio llega tarde al examen y va literalmente volando, al menos sin tocar suelo...

1 comentario:

Pseudonima anónima dijo...

Yo pensaba hasta no hace mucho que la puntualidad solo era llegar a tiempo y no hacer retrasar a los demás. Cuando llegué a Aldeafuente oí hablar un día en la misa de las niñas sobre la puntualidad en el horario y me quedé a cuadros.
Esa es la que cuesta mogollón , la que nadie ve!!!
- hacer algo que me he propuesto a una hora.
-no aplazar lo que cuesta.
- desconectarme de internet para estudiar aunque no me examine.
- irme a dormir y dejar todo, sobre todo dejar de leer.
Esta semana me propongo esta "puntualidad invisible"Gracias!!!!
Quiero unas zapatillas de esas para andar por Madrid!!