miércoles, 12 de marzo de 2014

Mirando al futuro

Siempre lo tenemos que tener presente, porque nos ayuda a explicarnos el presente y entender un poco mejor el pasado.
El futuro siempre es maravilloso, porque Dios nos cuida cada vez más. ¿Y nosotros a Él?


4 comentarios:

Vila dijo...

A decid verdad sí pienso en el futuro, pero sé que el Señor me quiere con locura (a pesar de mis errores que no son pequeños), y tengo la certeza de que el que él permita que sea será lo mejor para mí.

Así que a aceptar las cosas con alegría tal como vienen, yo ya tengo comprobado que todo es para bien, y de todo se puede sacar algo positivo.

Creo que me he ido del tema, sorry.

Pseudonima anónima dijo...

No entiendo muy bien lo del futuro... no me resulta muy tranquilizador, quizá porque pienso que está todo " descontrolao" o que yo controlo cero.
A mi me gusta pensar en el presente
, en el hoy, en este instante, en
hacerlo todo mejor hoy, ahora. No es que controle algo, pero pienso que tengo que poner de mi parte y mientras trabajo en eso no me preocupo del futuro.
El pasado me sirve para centrarme , un solo pensamiento del pasado y me doy cuenta que Dios estuvo a mi lado siempre, aunque yo no.
Me gusta lo que dice el Papa Francisco que los cristianos tenemos que ser " memoriosos".

Jaime Sanz dijo...

Si el presente es así de bueno.... ¿qué nos tendrá preparado Quien nos da la vida, para el futuro? ¡A disfrutar!

maria centenera (boticaria) dijo...

a mi me gusta pensarlo como lo decía San José María en Amigos de Dios donde habla de desprendimiento y dice:" Si viviéramos más confiados en la Providencia divina, seguros —¡con fe recia!— de esta protección diaria que nunca nos falta, cuántas preocupaciones o inquietudes nos ahorraríamos. Desaparecerían tantos desasosiegos que, con frase de Jesús, son propios de los paganos, de los hombres mundanos, de las personas que carecen de sentido sobrenatural. Querría, en confidencia de amigo, de sacerdote, de padre, traeros a la memoria en cada circunstancia que nosotros, por la misericordia de Dios, somos hijos de ese Padre Nuestro, todo poderoso, que está en los cielos y a la vez en la intimidad del corazón; querría grabar a fuego en vuestras mentes que tenemos todos los motivos para caminar con optimismo por esta tierra, con el alma bien desasida de esas cosas que parecen imprescindibles, ya que ¡bien sabe ese Padre vuestro qué necesitáis!, y El proveerá. Creedme que sólo así nos conduciremos como señores de la Creación, y evitaremos la triste esclavitud en la que caen tantos, porque olvidan su condición de hijos de Dios, afanados por un mañana o por un después que quizá ni siquiera verán."
creo q esto define todo y es algo q a mi y en mi corta de edad xo con mucho vivido siempre me ayuda a confiar en Él abandonarme en Él y a mirar el pasado,presente y futuro haciendole participe de mi vida.