sábado, 17 de abril de 2010

Mariscada abundante

Y es que es verdad que a veces nos sobra lo que comemos, peor tanto, tanto...
Aconsejaba S. Josemaría poner la mortificación en todos los platos, aunque solo fuera una cucharadita de las de café para comer un poco menos de los que nos gusta y un poco más de lo que no. Es un modo de tener presencia de Dios y señorío también en el comer.

4 comentarios:

adela dijo...

Que poco valor tienen las cosas sin sacrificio....

GRACIAS

Y tú, ¿cómo lo vives? dijo...

Lo mejor es que quien gana es uno mismo...

Gracias!!

Y tú, ¿cómo lo vives? dijo...

Por cierto, me ha encantado el video de ayer.. Realmente al niño le falta tiempo para enchufarle un beso a S.Josemaría!! Que suerteee!

Pseudonima anónima dijo...

Es una manera de tener presencia de Dios y un pelin de templanza. Cuando empiezo a caer cuesta abajo, siempre empezó todo por bajar la guardia en lo pequeno.