miércoles, 10 de noviembre de 2010

El plasta

Cuando nos empeñamos en insistir en lo mismo y a todas horas, nos ponemos pesaditos... Intentemos ser moderados en el hablar, y siempre escuchar a los demás, menos cuando la cosa se pone tan grave como la que a continuación podéis ver...

5 comentarios:

GAZTELU dijo...

Que barbaridad, que fuerte!!!!

Que importante es saber escuchar a los demás y no acaparar las conversaciones, aparte de ser una falta de caridad también es una falta de educación y yo añadiría que también es una forma de soberbia.

Saber escuchar es un arte que además redunda en nuestro beneficio
porque se aprenden muchas cosas .

GRACIAS

PD. seguimos rezando por Carlos, probablemnete hoy le pasarán a planta

Angelo dijo...

Juaaaassss. Me he tronchado. Que panzada de reír.
Hay muchos (y creo que tal como están las cosas, habrá más) que sienten esa necesidad de hablar. El amor ya no está entre ellos. Lo que voy a contar me ocurrió hace un mes. Un compañero de trabajo en su momento de tiempo libre para cenar, se vino donde yo estaba y me dijo:" me vengo aquí porque me han dicho que venga a darte la lata a ti" es verdad que es
casi como el señor del video, pero yo sentí que Jesús me decía: "Soy yo, acógeme" mi actitud cambió. Basta pedir al Señor saber verlo en los demás para que algo difícil se convierta en fácil.
Gaztelu: Sigo encomendando.

Pseudonima anonima dijo...

Pues ,no me ha quedado claro si el hombrecillo hizo la mili o era objetor de conciencia....
Casos tan espesos no tengo ninguno en mente, pero si hay algo que pienso muchas veces, tendemos a juntarnos con aquellas personas que tenemos un nivel de empatía elevado, y como el tiempo desgraciadamente es tan limitado dejamos a un lado a personas que nos resulta un esfuerzo y a lo mejor nos necesitan un montón!!!!!
El tema de apegos... A examen!!!
( No me imagino a Jesús reunido todo el día " con los de su cuerda"...)

Y tú, ¿cómo lo vives? dijo...

Muy bueno!!!

También pienso que no hay que hacer distinción de trato! "No tiene ningún mérito" pasarse horas estando con los que a uno le gusta... pero ¿por qué no estar con los que tal vez no coincidimos tanto? La vida te lleva a descubrir que personas con las que te creías incapaz de convivir, acaban siendo tu alma gemela. No sabemos nunca la oportunidad que podemos estar perdiéndonos, porque por ahí corren auténticos tesoros.

Gracias Capellanía por su buen humor!!

GAZTELU dijo...

Gracias Angelo por tu oración.

Pseudo, me ha encantado tu comentario de hoy sobre los "apegos" y en concreto en llevarlo a nuestro examen.

Eso que se conoce como "desprendimiento interior" es un tema peliagudo, cuantas veces nos apegamos a las personas sin necesidad, no estoy hablando de amistad.
Al único que debemos "prendernos" es al Señor que siempre estará ahi todos los días de nuestra vida, los "apegos" terrenales solo llevan al vacío más absoluto y a la inseguridad.
He conocido casos terribles de personas en esta situación y me han servido para crecer en esta virtud y poder ayudar a otros.
Al final lo cuenta es nuestra libertad interior de aceptar que estamos aquí para trabajar para la gloria de Dios.

Me parece un tema muy importante que merecería ser objeto de alguna entrada de vez en cuando, sin ánimo de enmendarle la plana D.Jaime, me parece actual y básico
para muchos otros aspetos de la vida espiritual.

GRACIAS