El tiempo pasa volando, la verdad. Y casi no nos ha dado tiempo a digerir que nos dejase un santo con el que vivimos tantos acontecimientos juntos.
Explicándolo en la plática el otro día, me di cuenta de que muchos de los que me escuchaban no habían conocido a Juan Pablo II. ¡Me asusté!
Celebraremos su canonización en muy pocos días. Encomendémonos a este gran santo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario