martes, 24 de febrero de 2009

¡Soy feliz!

Hay poca gente que lo pueda decir con todas las letras... Y el problema está en lo que entienden por felicidad. Muchos se conforman con sucedáneos: dinero, poder, comodidades... Otros, la buscan en lugares donde no está. Pero un cristiano sabe que la felicidad siempre tiene raíces en forma de cruz. Compruébalo en esta cuaresma.
El sacrificio gustoso por amar a Dios y al prójimo, hará felices a los demás y a ti, por acercarte más a Dios.

1 comentario:

Anónimo dijo...

SE PUEDE SER FELIZ SIN TENER CRUZ PERO ES IMPOSIBLE CONOCER LA VERDADERA FELICIDAD Y VIVIR TODA LA VIDA SIN ELLA.
LOS HOMBRES/MUJERES QUE NO CONOCEN EL DOLOR SON COMO IGLESIAS SIN BENDECIR.
JAMAS LE PEDIRE A DIOS QUE ME QUITE MI CRUZ,ME ESTARIA PRIVANDO DE LA POSIBILIDAD DE COLABORAR CON EL MAS INTIMAMENTE,SOLO LE PIDO ALEGRIA PARA LLEVARLA,QUE NO LA ESTROPEE YO CON MI EGOISMO.
GRACIAS