Cuántas veces nos pasa, que nos tiramos imaginariamente de los pelos por no haber estado en algún sitio, o no haber podido vivir determinado acontecimiento.
Tenemos por delante la Semana Santa. ¡No te pierdas la liturgia de esos días que es una maravilla!
2 comentarios:
Siii, eso pasa! Cuántos planes buenos que hemos dicho que no por pereza, prejuicios,que no me compliquen la vida, que esto no es para mi...
Y qué felices cuando nos " complicamos la vida".
El año pasado asistí a la Vigilia de Pascua tras muchos años de no haber asistido y me sorprendió la belleza de la ceremonia: la bendición del fuego, del agua; las lecturas tan bellas que se escogieron: desde el origen del mundo en el Génesis hasta el apocalipsis. No sé cuántas fueron, muchas, pero disfruté muchisimo de su lectura. En mitad de una de ellas mi hijo me dijo, de repente, que quería ser monaguillo, que se lo teníamos que pedir al párroco, y así fué desde el domingo siguiente hasta hoy, y el muchacho está la mar de feliz.
Este año me gustará repetir.
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